Lo sé, vivo en la luna. Acabo de enterarme que hace un año que ya no se fabrican bombillas incandescentes debido a una normativa europea. ¿Es que nos hemos vuelto locos o qué? ¡Pero si las de bajo consumo, que no dejan de ser neones pequeñitos, cansan un montón la vista! Son fatales para leer, dibujar o trabajar. Además son peligrosas porque si el recubrimiento no está bien hecho, o está deteriorado, lanzan rayos ultravioleta a mansalva. Y de toda la vida todo el mundo sabe que un tubo fluorescente, si se rompe, es lo más antiecológico que hay porque lleva mercurio. 

Estoy haciendo acopio de la típica bombilla solar de 60w, esa que es azul, que hasta ahora es el mejor invento para leer cuando se ha puesto el sol. El problema es que me he enterado demasiado tarde y ya quedan pocas. Qué mundo tan loco.