Lee Siegel, escritor y periodista, escribia un blog cultural para The New Republic, y, como en todo blog de cierto éxito, pronto aparecieron trolls llamándole retardado mongoloide y otras lindezas. Lo más grave, según cuenta en la introducción, era que: ¡Mi madre leia todas esas cosas, por Cristo Bendito!. Decidió aplicar contramedidas y él mismo creó un troll que atacaba a los trolls dentro de su propio blog. No fue una gran idea porque fue descubierto en poco tiempo, y ante lo patético de la situación, The New Republic le invitó a dejar de escribir en el blog. A raiz del suceso fue entrevistado en el New York Times y gracias a la repercusión tuvo la oportunidad de escribir este libro.
El libro es malo no porque critique a Internet, que es muy criticable, sino porque la críticas que hace son bastante cutres. Por ejemplo: el hecho de que algo aparezca en internet no lo convierte en obra de arte ni en algo de calidad, mucha gente miente en internet y no te puedes fiar de la información, toda la red está infectada por el mercado, hay mucha gente que no tiene nada que decir o que no sabe expresarse...Es todo obvio, además de cierto, pero es que nunca se ha pretendido lo contrario: los internautas tienen asumido cómo es internet. Además todas esas críticas también se pueden aplicar al mundo real. Una película no tiene calidad porque la estrenen en un cine ni un cuadro es una obra de arte porque lo expongan en una galeria; el mercado ha invadido hasta el más oculto rincón público y privado de la sociedad; y por supuesto, mucha gente miente y estafa continuamente, también las empresas. Así que podríamos decir que internet tiene todos los defectos del mundo real, más algunas ventajas.
Pero hay un punto que me llama la atención y creo que es donde reside la cuestión de todas las críticas que tanto este autor como muchos novelistas españoles hacen a internet. Siegel se queja de que internet ha acabado con nuestro ocio porque ahora somos prosumidores (creadores + consumidores) y dedicamos nuestro ocio a hacer pelis que colgamos en youtube, música que ponemos en myspace, historias que publicamos en blogs etc. El ocio está hecho para descansar y disfrutar de las cosas, según Siegel. Lo que quiere decir en el fondo es "¿Porqué perdéis el tiempo haciendo vuestras mierdas pudiendolo aprovechar consumiendo nuestras obras, que son mejores?"
No deja de ser una buena pregunta.
6 comentarios:
otro superinternetrollazo¡¡
aplicate el cuento y vete a pasear.
las obras de arte en el trono
xchaos
tienes razón, me voy a dar una vuelta en bici, te apuntas?
Pues básicamente porque me entretengo y me da la gana. Y eso es lo que hay que hacer con el tiempo de ocio entretenerse y hacer lo que a uno le da la gana.
Me extendería en el tema, pero algunas estamos en la oficina currando, sin jornada intensiva y con el aire acondicionado medio jodido, mientras otros presumen de que se van por la tarde a la playa o de una vuelta en bici. Lo que yo te diga, ¿quién te arrancó el corazón, pablitor?
Chaos: +1, como siempre dando en el clavo.
escapa, que las vacaciones cansan mucho desde que ya no tenemos ocio: mi manuscrito ha alcanzado las tres mil páginas, llevo ya tres sinfonias y dos largometrajes de zombies, uf, no puedo más
romeo, este enlace demuestra que tito Steven era un profeta http://miblogbydefault.blogspot.com/2010/07/discurso-de-steven-seagal-en-la.html
El Gran Maestro Steven siempre acierta. Lástima de peli. Una de las peores sin duda
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